Opinión: Hacia la digitalización de la banca

Para 2020, habrá más de 21 mil millones de dispositivos inteligentes conectados en el mundo, según Gartner. Cada día, un empleado promedio usa apróximadamente 5,5 aplicaciones a través de tres o más dispositivos.

Vivimos inmersos en una era digital, donde la convergencia del cloud, de la movilidad y el Big Data está potenciando nuevos modelos de negocios y cambiando la manera en que vivimos y trabajamos. La banca no es la excepción, la llamada Transformación Digital ha permitido en este sector -por medio de diversas tecnologías- digitalizar y automatizar los procesos que dependían del papel y las personas.

En la actualidad, de acuerdo a cifras de la Subtel, el 80% de las conexiones de Internet en el país se realiza a través de un smartphone. La conectividad ha impulsado la relación digital de los clientes con las entidades financieras, y en unos años, la gente elegirá su banco a partir de las opciones móviles que ofrezcan. Por eso, la banca tiene que incorporar soluciones que le permitan brindar aplicaciones de forma segura, optimizar el ancho de banda y el sitio web, para entregar a los clientes un servicio cada vez más móvil, en lugar de dirigirse a una sucursal.

Pero, la transformación digital de este sector también tiene que ver con  brindar a los empleados del banco herramientas que les permitan ser más productivos, aprovechando las ventajas que da la movilidad para atender mejor a los clientes incluso si se encuentran en zonas remotas. Por medio de la virtualización y herramientas de gestión de dispositivos móviles, asesores, cajeros, personal externo contratado y ejecutivos pueden tener un punto de acceso instantáneo a todo lo que necesiten de forma segura, lo cual se traduce en mayor productividad y en un mejor servicio. Al virtualizar, la información nunca quedará almacenada en los dispositivos sino que estará segura en el datacenter o en la nube.

Optimizar recursos es una misión constante en cualquier tipo de negocio, y junto con lo anterior, la banca ha sabido potenciar cada una de sus inversiones ligadas a la movilidad y virtualización, llegando incluso a la creación de nubes privadas capaces de entregar una mayor flexibilidad para un mejor servicio para sus clientes.

La digitalización en la banca es una realidad cada vez más cercana en Chile, ya que en el país hay sectores que están implementando servicios de virtualización. Adoptar las nuevas tendencias tecnológicas en el sector financiero es lo que hace falta para ampliar la cultura al interior de las organizaciones y la industria, sobre los beneficios del trabajo remoto, atendiendo las demandas de los que prefieren hacer trámites en cualquier momento y lugar.