Láser Fotona: el nuevo Lifting sin Cirugía

La promesa de una piel tersa, que permanezca joven a pesar del paso del tiempo, sin tener que entrar a pabellón, es cada vez más accesible para mujeres y hombres gracias a los rápidos avances de la tecnología.

Así es como ya está en Chile el Láser Fotona, equipo de última generación utilizado a nivel mundial, que combate la flacidez, atenúa las arrugas, regenera, hidrata y reduce las manchas. A diferencia de sus antecesores, promueve un tensado de la piel inmediato, sin tener que generar una dermoabrasión – o micro daño en su superficie – en la búsqueda de la reparación.

“Este nuevo equipo realiza un tratamiento no quirúrgico que viene a reemplazar los antiguos lifting, en forma segura, sin complicaciones y con tiempos de recuperación muy cortos. El calor entra en niveles mucho más profundos de la piel, provocando una remodelación de las fibras elásticas y una contracción de los tejidos, que hace que también se tensen los tejidos que están más en la superficie”, explica Donka Avdaloff, directora ejecutiva de la Clínica de Medicina Estética que lleva su nombre.

Renovación total en 4 pasos

Una sesión de lifting 4D dura aproximadamente 45 minutos y consiste en cuatro pasos, que incluyen el tensado de rostro, cuello y escote. En este tratamiento se utilizan dos tipos de láser, el erbio y el neodimio, que llegan a distintas estructuras de la piel y las mucosas internas.

En el primer paso del tratamiento se trabaja a nivel intraoral, para tensar las estructuras desde la mucosa interna, con el fin de borrar el surco nasogeniano y las líneas de expresión labiales. Durante el segundo y tercer pasos se entrega calor a niveles muy profundos de la piel para promover, además, la producción de neocolágeno. Y el último paso es lo que se conoce como el “velo de novia”, que opera a niveles más superficiales, dejando la piel con un aspecto terso y brillante.

Si bien para este tratamiento no se requiere anestesia infiltrativa ni sedativa, se recomienda el uso de una crema anestésica tópica, que se coloca unos 20 minutos antes del tratamiento, que adormece la superficie de la piel para ayudar a trabajar más cómodamente.

Si bien cada tratamiento es personalizado de acuerdo a las necesidades de cada paciente, en general se recomienda un protocolo de ocho sesiones, una cada 20 o 30 días.

Cualquier estructura que tenga piel se puede tensar, por lo que es posible realizar este tratamiento en otras partes del cuerpo, como por ejemplo las manos. Y en el caso de mujeres mayores, es posible además atenuar y hasta borrar las manchas que van saliendo con la edad.

Es muy recomendado también para estrías y cicatrices, atenuándolas en un 80%, al igual que otras lesiones de la piel como manchas, emangiomas y rosácea, entre otros.

Lifting express

Para las personas más jóvenes o si solamente se está buscando verse mejor para un evento en particular, como por ejemplo un matrimonio, el láser Fotona permite realizar tratamientos menos intensos, con resultados muy visibles en forma inmediata. “Lo que hacemos es un micro peeling ultraliviano, que deja la piel hermosa, perlada, brillante, tersa. Es lo que llamamos “velo de novia”. Es muy suave, no deja la piel enrojecida y tiene un efecto inmediato”, cuenta Donka Avdaloff.

Cada sesión dura 15 minutos, no necesita anestesia, y se recomienda realizarlo entre tres y cinco días antes del evento.

Rejuvenecimiento íntimo

Después de los partos, puerperio y menopausia, las mujeres sufren una caída importante de los niveles de estrógeno, una hormona fundamental para la salud de la mujer, que conlleva una serie de cambios en los tejidos íntimos, produciendo sequedad e irritación vaginal, entre otros síntomas.

Con este procedimiento es posible tensar las estructuras internas para resolver el síndrome de relajación vaginal que se produce por diferentes causas como, por ejemplo, haber tenido muchos partos o tiempos de parto muy prolongados.

“Para el 2050, las mujeres vamos a vivir en promedio hasta los 82 años, es decir, un tercio de nuestra la vida la vamos a vivir en menopausia, con estos síntomas. Por eso, se trata de mejorar la calidad de vida de las mujeres, que no arda, que no duela, que no tengamos infecciones urinarias a repetición y, por qué no, disfrutar de la vida sexual”, comenta la ginecóloga argentina Sandra Maestri, quien cuenta con una vasta experiencia en el uso del láser Fotona.

La doctora Maestri explica que hay tres procedimientos generales que permiten resolver diversas patologías, todos sin necesidad de anestesia.

Uno es el Renovalase, tratamiento indicado para la atrofia vaginal, que promueve la neoformación de colágeno para recubrir las paredes vaginales. La sesión dura entre cinco y siete minutos.

Otro tratamiento es el Intimalase, que incluye además un efecto de tensado, para cuando existe una mayor amplitud de las paredes vaginales, y la sesión dura entre siete y nueve minutos.

Y, por último, está el Incontilase, que se realiza cuando existe incontinencia de esfuerzo, por lo que se hace un refuerzo en la pared anterior de la vagina que la levanta para sostener la uretra. Este procedimiento dura entre diez y quince minutos.

Para cualquiera de estos tratamientos se recomienda realizar dos sesiones, con 30 días de diferencia entre ellas y una sesión de mantenimiento al año. Después de cada una de estas intervenciones, la única indicación es no mantener relaciones sexuales por un periodo de cinco días.

Más información en www.clinicadonka.cl/