¿Las App van a desaparecer?

Las populares aplicaciones que se alojan en los smartphones tendrían sus días contados. Así lo asegura un experto en comunicaciones y marketing digital, quien explica por qué estas plataformas no tienen asegurada su permanencia en la era moderna.

Toma tu celular. Cuando enciendes la pantalla, probablemente aparecen allí aplicaciones que usas continuamente, pero también muchas otras que bajaste sólo con un objetivo específico y que has olvidado borrar. Esta escena no se presentaría en el futuro, ya que las populares apps de hoy tendrían fecha de vencimiento. Así lo aseguró el publicista Cristián Guajardo, MBA Politécnico de Milán, en el seminario de lanzamiento del Magister en Comunicaciones Integradas de Marketing de la Universidad del Pacífico.

“Las aplicaciones van a desaparecer en términos de cómo las conocemos hasta ahora, porque hoy en día los usuarios descargan muchas apps y repletan el teléfono con ellas, pero al final de día, esas aplicaciones no le resuelven ningún problema real. Encontrar una solución, una información relevante, se puede hacer a través de un viejo mensaje de texto. Imagínate el día de mañana preguntarle a una reconocida tienda de herramientas y construcción si tienen un disponible una mesa de tal color o si les queda stock en tal sucursal, a través de mensajes de texto o en algo parecido al Facebook Messenger. Será mucho más fácil, por lo que descargar, ingresar y buscar en las aplicaciones quedará en el pasado”, afirmó el especialista con amplia experiencia profesional en IBM, Luxottica y ProChile.

El argumento se basa en que las preguntas simples y directas como ‘¿qué hora es?’, ‘¿lloverá mañana?’, ‘¿Chile le ganó a Brasil en el último partido?’, no son respondidas de manera rápida por las aplicaciones actuales. Entrar a una app de meteorología o de resultados deportivos quita espacio en el teléfono y un tiempo preciado que, según el experto, el usuario no está dispuesto a perder.

“Las preguntas del día a día, los cuestionamientos cotidianos y la información que realmente soluciona un problema, no está en las aplicaciones que se descargan en los teléfonos móviles. Estará en las plataformas que respondan de manera fácil e inmediata lo que realmente la persona necesita. En el futuro se harán preguntas sin tener que entrar a aplicaciones o páginas web, sino que se hablará como ahora se hace a un asistente de voz y éste responderá de manera inmediata. Este sistema es mucho más natural y efectivo”, indicó el experto en Marketing Digital de la Universidad del Pacífico.

Las clásicas apps para abrir documentos, para editar fotografías, para llevar un calendario y agenda, etc., desaparecerán, por lo que los celulares ya no necesitarán tanto espacio para guardarlas. “Todo se hará a través de Internet. El teléfono más chico hoy tiene 16 GB de memoria, pero con este cambio, con el adiós a las aplicaciones, no necesitarán tener más de 8 GB. Cada vez tendrán menor capacidad de almacenamiento, pero procesarán la información más rápido”, señaló Guajardo, actual Strategic Account Manager de Zomato, una de las aplicaciones con mayor proyección en Chile y en el mundo.

La locura por la presencia en redes sociales

“En el futuro todo estará integrado y no necesitarás descargar la aplicación de esa tienda para saber algo, o buscarlo en su página web, sino que a través de un mensaje de texto o de plataformas de chat podrás saberlo”, comentó Cristián Guajardo.

Y es que algo de esa visión de futuro ya se está viviendo hoy en día. Hace unas semanas Facebook presentó en su reunión anual en San Francisco a los chatbot, avatares virtuales que ayudan a los usuarios de Facebook Messenger a chatear con robots de las empresas con la misma naturalidad con que lo hacen con sus amigos. “En pocos años más no tendrás que descargar la aplicación Uber en tu celular, sino que podrás chatear y pedir un taxi de Uber a través de un Messenger”, ejemplifica el especialista.

¿Te lo imaginas? La mayoría de las empresas hoy en día se comunican con sus clientes o potenciales usuarios a través de las redes sociales, ofreciendo una especie de servicio postventa que deja mucho que desear. Aunque tienen cuentas en todas las plataformas, finalmente su labor allí es de delegar o redirigir las solicitudes.

“Las empresas chilenas deben entender que más allá de crear cuentas en diferentes plataformas y lanzar aplicaciones, deben volver al origen, es decir, a resolver el problema del usuario. No importa si tienes muchos fans o seguidores, lo que importa es si realmente solucionan el problema o no, como por ejemplo, si cayó Internet qué hará la empresa para restablecérmelo. En el futuro ya no va a ser necesario descargar la aplicación de esa compañía ni hablarle por redes sociales, sino que el usuario podrá hablar de tú a tú y pedirle a las marcas de manera directa lo que necesita, y éstas a su vez le contestarán por una vía simple y efectiva”, concluyó Cristián Guajardo, publicista de la Universidad del Pacífico.