Cirugías Plásticas: Qué debe considerar si busca un retoque este verano

En un 30% aumentan los pacientes que llegan a las consultas de los cirujanos plásticos durante enero y febrero. Sepa cuáles son los procedimientos más demandados por mujeres y hombres y vea si está a tiempo de lucir su nueva figura en estas vacaciones.

El verano es la temporada favorita de los chilenos para reinventarse con una cirugía plástica. Durante enero y febrero, las consultas aumentan en un 30%, principalmente en mujeres, asegura el Cirujano Plástico y Reconstructivo, Miembro de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica, Esteban Torres. Sin embargo, hay varios aspectos que debe considerar si está pensando en un retoque estas vacaciones.

En esta temporada, los procedimientos más demandados por el público femenino están claros: “Las mujeres están mentalizadas en el verano, y consultan principalmente por el contorno corporal. Dicen ‘no alcancé a ir al gimnasio  antes de la playa o la piscina’ y buscan la liposucción. También es una época donde buscan un aumento mamario”, comenta el experto.

En el caso de los hombres, ellos consultan por la liposucción para sacarse el típico “rollito de la cintura”. También se someten a la ginecomastia, procedimiento que se aplica para sacar la grasa de la zona pectoral.

Cuestión de tiempo

Si es de esas personas que dejó para el verano la idea de someterse a una cirugía, necesariamente debe considerar los tiempos y no seguir postergando su decisión. Tomando en cuenta que cualquiera de estos procedimientos quirúrgicos necesita por lo menos 3 a 4 semanas desde la operación para poder empezar a notar cambios reales, si quiere lucir su nueva figura en febrero lo recomendable es intervenirse ya, en enero.

El paciente debe considerar que en el posoperatorio hay que usar fajas, en el caso de una intervención abdominal, o un sostén si el procedimiento fue un aumento mamario. Además, hay que tener en cuenta que debe someterse a  masajes de drenaje linfático con una kinesióloga para disminuir el edema y la inflamación. En promedio, son unas 10 sesiones por al menos 3 semanas.

El otro cuidado imprescindible en el posoperatorio es proteger al máximo las cicatrices del sol. “El hecho de que esté vestido no significa que me esté protegiendo. No se puede exponer al sol sin protección, hay que hacerlo con un buen bloqueador y con ropa con filtro UV”, aclara el doctor.

El paciente debe contemplar  también una o dos semanas de licencia médica antes de volver a trabajar, y tiene que estar consciente que después de la operación vienen los controles con el cirujano. “Habitualmente yo controlo a mis pacientes hasta un año después de la operación. Al principio, son una o dos veces a la semana, porque soy un convencido de que las complicaciones hay que prevenirlas más que tratarlas. Y para prevenirlas hay que anticiparlas”, indica el doctor Esteban Torres.

Con todo, hay que asumir que en el período después de la cirugía, pueden surgir imprevistos. “La recomendación es nunca operarse si uno está muy justo con los tiempos. Las cirugías son procedimientos que no están exentas de riesgos. Entonces, si tengo programado un viaje en 3 a 4 semanas, lo que me conviene es hacer ese  viaje y operarme después, porque basta que tenga cualquier detalle en la herida y se arruinaron las vacaciones”, advierte el cirujano plástico.

Cambio de vida

Otro punto clave es que el paciente debe comprender que la cirugía no hace milagros y tiene que poner de su parte para conseguir resultados. “No basta con operarse, todo esto está asociado a un cambio de vida, partiendo por la alimentación, con una dieta balanceada, rica en fibras, proteínas, tomar mucho líquido, bajar o eliminar el consumo de alcohol, disminuir las frituras y las grasas refinadas. Y junto a eso, hay que disminuir el sedentarismo y hacer deporte. Si logro ambas cosas, la probabilidad de que conserve el resultado de mi cirugía es sobre el 80 a 90 por ciento. Si no cambio, la probabilidad de que mantenga mi cirugía es menos del 10 por ciento”, advierte el especialista.