Polimorfosis, los arquitectos de las soluciones para la salud
|Una pareja de jóvenes arquitectos demuestra que se puede hacer innovación en Chile con posicionadores que hacen la vida más fácil a los equipos médicos en las salas de operaciones. “La ventaja es que te proporcionan seguridad”, confirma Paula Penroz, anestesista del Hospital de Rancagua. Las metas de estos emprendedores chilenos son ambiciosas y ya trabajan para llega a México y Ecuador.
Catalina Boero es una arquitecta y emprendedora chilena que un día caminando por el Paseo Ahumada vio en el escaparate de una farmacia un producto creado por su pareja, Luis Bertolo. Sin embargo, el insumo era un plagio descarado del posicionador médico de poliuretano que crearon y desarrollan en su empresa, Polimorfosis.
Más que una anécdota, el caso es un ejemplo de la batalla que deben dar los emprendedores chilenos por proteger sus creaciones, llevando el tema a la justicia. “Una empresa nos plagió el producto y empezó a comercializarlo con nuestros mismos clientes. Pero como desde el inicio tuvimos la visión de patentarlo, pudimos ir a la justicia con una demanda civil y otra penal. Logramos sacarlos del mercado ya que nuestra calidad es superior, pero queremos que quede el antecedente para que hechos como estos no se vuelvan a repetir”, cuenta Catalina.
El objetivo de Polimorfosis es hacer la vida más fácil a los equipos médicos en un lugar tan crucial como es la sala de operaciones. Su primer producto fue un posicionador para la cabeza en decúbito supino (en posición boca arriba) durante una operación, algo que hasta ahora era resuelto bien “a la chilena”. “En hospitales públicos se ocupan a veces sábanas en la cama dobladas (“sabanillas”) que se ponen bajo la cabeza del paciente. Eso no da ninguna seguridad de que no se mueva con los movimientos quirúrgicos, además que tienen costuras que pueden quedar marcadas en la piel”, comenta Paula Penroz, anestesista del Hospital de Rancagua.
Junto al posicionador supino de espuma moldeada ya disponible en el mercado, Polimorfosis tiene en producción un posicionador prono, para las operaciones con paciente boca abajo. En paralelo, ya están trabajando el diseño de otros 4 posicionadores: para extremidades en ambos decúbito; para tórax en posición prono; proctológico; y para obesos.
“Todo este trabajo ha sido en cocreación con los doctores. Lo que hicimos fue tomar su problemática desde otra perspectiva, y aplicar nuestros conocimientos de ergonometría y distribución de cargas para la solución de esos problemas”, cuentan sobre el trabajo de “arquitectura de las cosas” que han ido desarrollando junto a su asesor técnico, el médico Luis Fernando Bertolo.
La utilidad de estos posicionadores de Polimorfosis es confirmada por los especialistas. “La ventaja es que te proporciona seguridad. Te ayuda a mantener una posición fisiológica del paciente sin desplazamiento lo que disminuye los riesgos de complicaciones médicas. Lo he ocupado 4 años y dentro de todos los posicionadores que he usado es mi favorito”, comenta la anestesista Paula Penroz.
La profesional añade que otras ventajas del posicionador de Polimorfosis es que sirve tanto para posición supina como lateral, en pacientes pediátricos y adultos, y es conveniente en términos de su relación entre precio y durabilidad. Al respecto, Catalina Boero explica que un posicionador de gel de la competencia (de la multinacional Covidien) “se comercializa a más de $ 30 mil. Pero tiene el problema de que el gel va cediendo con el uso, es pegajoso, lo que le molesta mucho a los médicos, no sirve para todos los tamaños de cabeza por lo que hay que pedirlos por talla y son incómodos de utilizar. En cambio, el de Polimorfosis cuesta $3 mil”.
Hasta el Extranjero
El primer posicionador de Polimorfosis se probó en la clínica Santa María en 2010 y a los dos meses ya estaban haciendo su primera venta, consistente en 30 unidades. En la actualidad, también están presentes en clínica Indisa, Tabancura y el Hospital de Rancagua, y se encuentran en conversaciones con otras instituciones privadas y públicas.
También quieren dar un salto al extranjero. Participaron en la gira de un grupo de emprendedores de Santiago Innova a Zapopán (Jalisco, México), donde contactaron a la empresa distribuidora de insumos médicos M&S Salud. Así apuestan a la internacionalización de la empresa a ese país y también a Ecuador, para lo cual recibieron una inyección de recursos del SSAF (Subsidio Semilla de Asignación Flexible para Emprendimiento de Innovación) de Corfo, a través de Santiago Innova.
Asimismo, evalúan producir ellos mismos, sin tener que externalizar la fabricación de sus productos. “Pero como somos un laboratorio de diseño, nuestra idea a futuro es empezar a fabricar nosotros, comprando las máquinas inyectoras, y así tener el control de todos los procesos del producto”, señalan, con la mente puesta en expandirse a otras áreas como Polisafe (seguridad y protección industrial y vial) y Polisport (protecciones deportivas).
El camino del Emprendimiento
Catalina y Luis partieron con Polimorfosis como un hobby mientras mantenían su trabajo en una empresa constructora. Pero dado el éxito que tuvo el producto decidieron poner todas sus fichas en el emprendimiento que han desarrollado al alero de Santiago Innova. “El 2012 nos dimos cuenta que esto es un buen negocio, nos gusta hacer esto, nos gusta dar soluciones, es parte de nuestra área, y nos metimos de lleno al laboratorio de diseño”, cuenta Catalina.
Para Polimorfosis, el camino del emprendimiento en familia ha sido satisfactorio. “Nunca es fácil emprender, te levantas y te acuestas trabajando. Pero la gratificación es distinta, no es lo mismo estar trabajando para un tercero que para tu propio beneficio, aparte que no tienes tope, puedes que estés muy alto, muy hundido, pero sabes que puedes subir hasta el infinito. En cambio, trabajando para un tercero sabes que hasta cierto punto puede subir y no vas a llegar más allá que eso”, resume Catalina sobre el espíritu de esta empresa familiar.