2015: El agridulce año de la música chilena

La Ley del 20% de música chilena en las radios auguraba un buen año para los artistas nacionales. Sin embargo, el recién anunciado cierre de Radio Uno oscureció el panorama. Un especialista explica por qué esa bajada de telón simboliza el escenario actual de la música chilena, cuyas plataformas de difusión están cambiando.

En medio de aplausos y festejos se aprobó la Ley del 20% de música chilena en abril de este año. Artistas nacionales celebraron la iniciativa, que busca fomentar la difusión de productos musicales hechos en casa. Pero con la noticia del cierre de la Radio Uno, la cual se caracteriza por ser un espacio dedicado a la música chilena, el panorama se oscureció.

“Las tribunas de difusión, tanto para los artistas nacionales como internacionales, van residiendo cada vez más en las nuevas plataformas digitales, abandonando las clásicas FM y AM de toda la vida. Sin embargo, obviando internet y el streaming, resulta un golpe doloroso el cierre de Radio Uno, que a todas luces apuntará en un futuro cercano a un espacio digital como lo señalan los nuevos tiempos. Los artistas deben adaptarse a las nuevas vitrinas y atesorar lo que la ley del 20% les brinde”, explica Sebastián Pinilla, asistente técnico de la Escuela de Música y Tecnología de la Universidad del Pacífico.

Las nuevas tecnologías están cambiando la forma y los lugares de difusión de la música en general. Plataformas como Spotify, iTunes y Youtube están transformando la manera en que se consume el arte de las melodías. Aunque en Chile aún las radios tienen una gran penetración, el escenario está empezando a cambiar.

“La avanzada de emisoras digitales y plataformas de streaming han quitado el grado de influencia que tenían las radioemisoras nacionales. En efecto, la cantidad total de descargas durante el 2015 en PortalDisc fue de 18.923. Si lo comparamos con la cantidad de descargas en iTunes de, por ejemplo, la canción “Uptown Funk!” (Mark Ronson & Bruno Mars) que tan solo en el primer semestre del presente año presentaba 4.833.000 descargas, quizás no resulta una cifra muy alentadora. Sin embargo, en el escenario criollo bordear las casi 20.000 descargas en PortalDisc, sitio que principalmente difunde música chilena, es un claro reflejo de que el mercado musical digital llegó a Chile para quedarse, convirtiéndose hoy en el principal foco de público objetivo para los artistas nacionales, de mano de las redes sociales, el streaming y de los nuevos puntos de venta directa online”, asegura Pinilla.

Las estadísticas del 2015 del PortalDisc dan cuenta de la gran arremetida de artistas independientes, que sin el patrocinio de un sello discográfico logran hacer un disco y ser escuchados por el público. “La proliferación de las nuevas y cada vez más asequibles soluciones acústicas y tecnológicas para la grabación de audio, replica en que más de 500 discos publicados en PortalDisc durante el 2015 (de un total de 831) se desarrollen bajo un sello independiente.

En cuanto a estilos, el Folclore-Fusión (o “Popclore”, como lo denomina la cantautora chilena Delia Valdebenito) ha tenido un gran impacto en las parrillas radiales, festivales y portales de difusión actuales, obteniendo incluso el apoyo de ‘CHV Música’ y ‘Plaza Independencia’, sellos que después de los artistas independientes, lideran la tabla de descargas anuales en PortalDisc”, señala el técnico en sonido.

En definitiva, el 2015 fue un año agridulce para la música chilena. Mientras se resguardó su difusión en radios a través de la Ley, una emisora emblemática anunció el cierre de transmisiones que se hará efectivo el próximo año.

“La Ley del 20% de música chilena estipula que más de la mitad de música nacional debe emitirse en un horario de mayor audiencia (de 6:00 a 22:00 hrs.). Frente a ello, algunos pensarán que las cosas han cambiado mucho, pero la verdad es que no es tan así. Gracias a la continua creación de buenos fonogramas, tanto en calidad de sonido y composición, las radios han abierto su programación sin tanto sacrificio. Cabe discutir si la llegada de esta ley llega en el momento adecuado, ya que el 2015 demostró que lo digital arremete con fuerza en el ambiente musical”, concluye Sebastián Pinilla, asistente técnico de la Escuela de Música y Tecnología de la Universidad del Pacífico.